Los expertos afirman que no existe una respuesta única sobre la frecuencia de lavarse el cabello, ni sobre lo que puedes hacer para mantenerlo "limpio" en los días de descanso.

La regularidad del lavado del cabello depende de múltiples aspectos como, por ejemplo, el grado de grasa del cuero cabelludo y los niveles de actividad que realiza cada persona.

"Es una cuestión personal", señala a CNN el Dr. Anthony Rossi, dermatólogo adjunto del Centro Oncológico Memorial Sloan Kettering de Nueva York. Según el profesional, lavar con demasiada frecuencia el cabello puede resecarlo y apagarlo, mientras que la acumulación de grasa por no lavarlo lo suficiente también puede provocar mal olor y escamas.