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Profesionales de la salud tendrían efectos similares al de un veterano de guerra

  • Martes 3 de agosto de 2021
  • 11:28 hrs

Así lo advirtió la Dra. Paula Ceballos, decana de la Facultad de Ciencias de la Salud UCM y quien ha investigado desde hace más de ocho años los riesgos psicosociales en trabajadores de unidades críticas. La académica hace un llamado a intervenir de forma inmediata.

La pandemia por Covid-19 ha sido la peor del último siglo y quienes han estado en primera línea de combate no solo se han tenido que enfrentar al virus sino a graves afectaciones físicas y psicológicas producto de la alta carga laboral.

“Quienes trabajan en unidades críticas como UCI y urgencias han estado en una situación de estrés permanente. No solo hoy están agotados por la pandemia, están estresados desde hace más de 10 o 15 años”, explicó la Dra. Paula Ceballos, decana de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Católica del Maule (UCM).

Ceballos quien, en 2014 a través de su tesis doctoral, ya había demostrado la existencia de “un alto nivel de exigencia psicológica y sobre carga mental en todos los equipos de salud de las unidades críticas más importantes del centro sur de Chile”, va más allá y hace una contundente advertencia.

“Todos los trabajadores primera línea, en la postpandemia, van a tener un síndrome similar al de un veterano de guerra. Van a tener muchas secuelas físicas y mentales, por lo tanto, requieren un trabajo permanente, intervenciones efectivas y protocolarizadas, no solamente un aplauso y un bono”, afirmó.

Ceballos advirtió que, en la post pandemia, es posible que se evidencie “un aumento de suicidios, depresión, ansiedad, crisis de pánico. A nivel de salud física, problemas cardiovasculares por que la presión puede generar infartos, accidentes cerebrovasculares, trombosis venosas profundas, problemas digestivos e, incluso, problemas inflamatorios e infecciosos por una disminución de las defensas”, sostuvo.

De acuerdo con la académica, se generará un círculo vicioso, pues estos problemas de salud “aumentarán las licencias y, por tanto, el requerimiento de profesionales, lo que se traducirá en un aumento en la contratación de profesionales recién egresados que, por un lado, es muy bueno, pero que necesitan acompañamiento de personas con mayor experiencia y, estas al estar ausentes, se producirá mayor estrés en el equipo y un círculo vicioso”, dijo.

Es urgente intervenir

Si bien, desde 2016 la legislación chilena incorporó la evaluación de los riesgos psicosociales de los trabajadores, “se queda solo en la medición y en el reporte a la Superintendencia de Salud”, pero no se establece cómo se debe intervenir a aquellos empleados que resulten con altos niveles de riesgos. “Esto todavía no está claro”, dijo Ceballos, aunque “hay varias estrategias desde mutuales y universidades, aún no está protocolarizado cómo debe intervenirse”, indicó.

De acuerdo con la experta quien, desde la Facultad de Ciencia de la Salud UCM ya ha intervenido trabajadores de unidades oncológicas y actualmente lidera un proyecto FIC para mujeres trabajadoras, “es urgente determinar intervenciones protocolizadas, validadas y estandarizadas en diversos riesgos. Debido a que los recursos son finitos, lo que he sugerido en investigaciones es realizar un diagnóstico de la situación y priorizar los riesgos más altos para luego establecer estrategias de intervención y mantener dentro de las organizaciones una política de mejora continua de los trabajadores”, explicó.

Lo anterior implica que cada organización genere estrategias adaptadas a su propia realidad porque “lo que pasa en Arica es muy distinto a lo que pasa en el Maule, no son las mismas personas, ni la misma estructura organizacional ni la misma realidad”, detalló.

“Es tan importante cuidar de la salud de la ciudadanía como cuidar de la salud de los trabajadores de la salud porque si no están bien, el equipo de salud entregará un servicio deficiente a la población”, puntualizó la doctora Ceballos.

Mujeres las más expuestas a riesgos

La académica de la UCM, advirtió que las mujeres son las más expuestas a estos efectos postpandemia, especialmente por una situación de “doble presencia” que implica traspasar las preocupaciones del hogar al trabajo. “Por la cultura latina, esto probablemente está más traspasado en las mujeres y esto se ha agudizado en las trabajadoras del sector educativo durante la pandemia”, explicó.

“Está demostrado que, en todo ámbito, las mujeres ganamos entre un 20 y un 30 por ciento menos, aunque hay empresas que eso se ha mejorado, entonces las compensaciones siempre están minimizadas para este grupo. A nivel cardiovascular, las mujeres tenemos un alto nivel de sedentarismo, los niveles de estrés aumentan el cortisol y, fisiológicamente, eso contribuye a aumentar el peso y el sobrepeso es un factor de riesgo cardiovascular. Con el estrés se fuma o se ingieren otros alimentos y todo esto se vincula de forma dañina a la sobre carga laboral, a la doble presencia a la sobrecarga laboral y se aumentan los riesgos psicosociales y cardiovasculares”, puntualizó la decana de la Facultad de Ciencias de la Salud de la UCM.

Actualmente, la Dra. Paula Ceballos es quien lidera el proyecto FIC denominado Invierte Woman que, por primera vez determinará el perfil cardiovascular de las mujeres trabajadoras del Maule. “Estos datos nos permitirán generar sesiones de intervención y, en tres años aportar con una aplicación de acompañamiento disponible para todas las mujeres del Maule y, esperamos, de Chile y que tenga un uso con el equipo de salud y aportar así a la comunidad”, cerró.